sábado, 29 de noviembre de 2014

DICIEMBRE ....COMO LA SALA DE UN TEATRO, CUANDO EL TELÓN CAE, FINALIZADO EL DRAMA





Como ya llegó diciembre, dejadme que os hable ahora de este diciembre que viene ya, y que el poeta Ángel González nos enseñó en 1961 desde las páginas de su libro Sin esperanza, con convencimiento. Puede que otro tiempo venga, distinto a éste.

DICIEMBRE
Diciembre vino silenciosamente,
estirando las noches hasta casi
juntarlas:
el alba a pocas horas de distancia
del crepúsculo lleno de tristeza,
y un mediodía sin sol,
un mediodía
de pájaros ocultos y apagados
ruidos,
con bajas nubes grises recibiendo
el sucio impacto de las chimeneas.

Diciembre vino así, como lo cuento
aquel año de gracia del que hablo,
el año aquel de gracia y sueño, leve
soplo de luces y de días,
encrucijada luminosa
de lunas hondas y de estrellas altas,
de mañanas de sol, de tardes tibias
que por el aire se sucedían lentas
como globos brillantes y solemnes.

Pero diciembre vino de ese modo
y cubrió todo aquello de ceniza:
lluvia turbia y menuda,
niebla densa,
opaca luz borrando los perfiles,
espeso frío tenaz que vaciaba
las calles de muchachas
y de música,
que asesinaba pájaros y mármoles
en la ciudad sin hojas del invierno.

Pájaros muertos, barro, nieve sucia,
lanzó diciembre sobre el año, y todos
abandonamos en silencio
su ámbito feliz, pisando indiferentes
los restos consumidos de sus cosas,
el envoltorio de sus alegrías,
dejándolo cubierto de papeles
y rotas luces,
oquedad sumergida
en decepción y desfallecimiento,
como la sala de un teatro, cuando
el telón cae, finalizando el drama.

De esa forma dejamos aquel año,
sórdido
recinto
manchado de recuerdos derribados
y deseos oscuros
y nostalgia
-y por qué no también remordimiento-
sin mirar para atrás,
sin querer enterarnos
de su agonía lívida a las puertas de enero.


martes, 25 de noviembre de 2014

DESPERTAR DE LA PARÁLISIS


Ana Gorría nació en Barcelona en 1979. Es, además de poeta, crítica en periódicos como Público. La hemos podido leer en la revista Quimera. De su poemario Clepsidra nos llamó la atención su capacidad para crear símbolos. Nos gustó mucho Araña, del que leemos:







BEMOL


Con los ojos clavados en el techo,
ignorar
              por qué pesan los párpados,
cuánto tiempo perdido
y cómo despertar de la parálisis.

(de Araña, El Gaviero, 2005)

domingo, 23 de noviembre de 2014

OTRO PAÍS, OTRO PAISAJE




Olvido García Valdés (Santianes de Pravia, 1950) es licenciada en Filología Románica y también en  Filosofía. Es profesora de enseñanza secundaria. Fue directora del Instituto Cervantes de Toulouse (Francia). Ha participado en la revista Los Infolios  y en El signo del gorrión. Su obra aparece en distintas antologías, como La prueba del nueve (1994), Ellas tienen la palabra (1997), El último tercio del siglo (1968-1998); también en la Antología consultada de la poesía española (1998), o Las ínsulas extrañas. Antología de poesía en lengua española (1950-2000). Publicó en 1986 El tercer jardín; en 1990 Exposición y en 1984 Ella, los pájaros; después vino  en 1997 Caza nocturna; también es autora de Del ojo al hueso, además de Y todos estábamos vivos. Su obra está reunida en Esa polilla que delante de mí revolotea. Poesía reunida (1982-2008). Leemos ahora: 



Otro país, otro paisaje,
otra ciudad.
Un lugar desconocido
y un cuerpo desconocido,
tu propio cuerpo, extraño
camino que conduce
directamente al miedo.
El cuerpo como otro,
y otro paisaje, otra ciudad;
atardecer ante las piedras
más dulcemente hermosas
que has visto,
piedras de miel como luz.